La detección temprana y el tratamiento oportuno son esenciales para detener, o incluso revertir, el daño al hígado causado por la esteatohepatitis asociada a disfunción metabólica (MASH).
Los síntomas de MASH pueden ser imprecisos, inespecíficos o incluso estar ausentes. Algunas personas que reportaron síntomas de MASH antes de recibir el diagnóstico experimentaron:
Dolor abdominal
Náuseas
Pérdida del apetito
Fatiga
Hinchazón abdominal
Debido a que los síntomas pueden no indicar claramente esta enfermedad, es importante estar al tanto de ciertos factores de riesgo que pueden aumentar la probabilidad de desarrollar MASH.
Un examen de detección puede revelar MASH
Hacerte un examen para detectar MASH te ofrece la mejor oportunidad de un diagnóstico temprano para que puedas tomar medidas. ¿Por qué es importante? Cuando MASH se atiende en una etapa inicial, el daño al hígado puede detenerse o incluso revertirse.
Algunos profesionales de la salud se refieren a MASH como una enfermedad “silenciosa” porque muchas personas no presentan síntomas. Incluso si los presentan, es posible que no relacionen esos síntomas con MASH.
Las etapas avanzadas de MASH vienen con posibles complicaciones que no tienen nada de silenciosas, como cáncer de hígado o insuficiencia hepática debido a cirrosis. Afortunadamente, la detección y el tratamiento oportunos pueden ayudar a prevenir complicaciones.
Conoce qué factores de riesgo y qué otras enfermedades comunes están asociados a MASH.
La información proporcionada es solo para fines educativos.